Con la nueva normativa, el ayuntamiento pretende solucionar la problemática existente en torno a numerosas construcciones antiguas que presentan peligro de derrumbe y que, en algunos casos, hace días, obligaron a cortar tramos de varias calles en la villa moscona.

El teniente alcalde y responsable de Urbanismo, Alejandro Patallo, de Aigras, señaló que el ayuntamiento "intenta desde hace tres años que los propietarios acometan reparaciones en inmuebles en mal estado para mantenerlos con el debido ornato y seguridad", pero no siempre se consigue.

"Instamos a más de un centenar de vecinos a actuar y hay gente que no hace caso de las medidas coercitivas", explicó.

Con la entrada en vigor de la ordenanza, el gobierno formado por PP y Aigras espera solventar este problema.

"Los técnicos inspeccionarán los inmuebles y luego se remitirá un informe a los propietarios en el que se detalle qué obras deben ejecutar para eliminar cualquier riesgo; como si se tratara de una ITV en edificios", indicó Alejandro Patallo.

Si algún particular no lo hace, será el consistorio quien actúe y después pase la factura.

BIENES DE INTERES Una vez aprobada la ordenanza, se empezará a aplicar de manera "progresiva".

Las primeras edificaciones que se inspeccionarán serán las del casco histórico de la villa, "catalogado Bien de Interés Cultural (BIC)", subrayó el concejal de Urbanismo.

El resto de construcciones BIC de la capital y los elementos incluidos en el Catálogo Urbanístico concentarán las siguientes inspecciones.

atallo recalcó ayer que la administración "tiene la obligación de velar por el cuidado de los inmuebles" y que actuará con "firmeza".

"Los propietarios deberán elegir entre reparar los mayores desperfectos o derribar los inmuebles, si es que no están catalogados", dijo.

El gobierno cree que "la falta de medios económicos y las herencias sin adjudicar motivan, en muchos casos, que los dueños de viviendas las abandonen sin intentar conservarlas".