Hacia pocos días habíamos coincidido en una céntrica cafetería de Grado donde mantuvimos una larga conversación y, en el transcurso de la misma, me puso al corriente de los males que padecía.

Derrochaba ansiedad por recuperar el tiempo que había perdido los últimos meses. Su mirada, su animosidad y su actitud distaban mucho de ser una persona a quien la enfermedad hubiese debilitado, al contrario, demostraba una fortaleza y unas ganas de vivir para llevar a cabo un sin fin de proyectos que tenia in mente, me dijo, que me dejo sorprendido. Como sorprendido quede hace unos días al ser conocedor de tan triste desenlace.

Quizás que para alguna gente de Grado el nombre de Gabriel Corral no le dice mucho pues la sencillez y el pasar desapercibido era su “humilde manía”, como me decía él, pero “Corral” era, además de una excelente persona, un gran artista pictórico.

Empleado de la Fábrica de Trubia, donde trabajo desde joven, dedicaba su tiempo libre a plasmar en el lienzo o la cartulina infinidad de paisajes de la geografía regional o retratos de numerosos personajes.

Mi relación con él se remonta ya a principios de los ochenta cuando colaboró con una exposición de pintores locales que la HERMANDAD DE SANTIAGO Y SANTA ANA, de la que yo era directivo, organizó en la Sala de Fiestas Mayjeco; posteriormente realizo varias exposiciones en Grado bien en solitario o en colaboración con escultores amigos. Amen de numerosas exposiciones en distintos lugares de Asturias

Dominaba el óleo y los dibujos a plumilla de motivos asturianos especialmente el prerrománico (de ellos conservo una amplia colección que hace años me regalo en reconocimiento a nuestra amistad, me dijo).

Lamentablemente Gabriel Corral nos ha dejado a una edad temprana y con una obra inacabada, el pasado día 8 de diciembre hace 30 años (1981) clausuraba su exposición de Grado, el 2 de diciembre de 2011 clausuro su vida. Gabriel, te recordaremos.

Se cumplen también 30 años de las exposiciones de Julio Álvarez, de Barcena y hoy, día 12, la de Valentín del Fresno, los cuales junto con otros autores como Lucia Álvarez, Favila, Hugo Fontela, Cielo Costa, Margot, Alicia Ramos y un sin fin que me es imposible enumerar colgaron en las salas de Grado sus obras para el deleite de todos nosotros.

Nando Arias