El pasado miércoles, la Guardia Civil de Grado recibía a las 19.30 la llamada de una mujer, que relataba que se había tenido que refugiar debajo de una cama en un dormitorio de su vivienda después de que su hijo le hubiese puesto un cuchillo en el cuello y amenazado con arrojarla por el balcón. Además, se encontraba herida, con un tajo en la mano, producido al defenderse de su vástago.

Tras un forcejeo, la mujer había conseguido zafarse de él y pudo refugiarse debajo de la cama, pero señaló a los agentes que atendieron su llamada que estaba encerrada en la habitación y que su hijo continuaba en la vivienda muy alterado. 

La Guardia Civil, conocedora de la problemática de la familia, se personó allí de inmediato, intentando por todos los medios que el hombre se calmara y abriera la puerta. Pero no fue posible, por lo que solicitaron la presencia de la Bomberos de Asturias, que se vieron obligados a forzar la entrada a la vivienda.

Una vez dentro, los agentes tuvieron que emplearse para reducir al agresor. En el forcejeo, uno de los números resultó herido de carácter leve. Finalmente, lograron inmovilizar al sujeto, F. J. F. M. de 43 años, justo dos horas y media de la llamada de su porgenitora pidiendo auxilio. Al detenido le constan numerosos antecedentes, muchos de ellos por hechos similares. Tras los hechos, fue puesto a disposición judicial. 

La víctima, de 75 años de edad, fue trasladada al Centro de Salud de Grado, donde le pusieron puntos de sutura por su herida en la mano.

Noticia publicada en El Comercio Enlace